jueves, 30 de julio de 2015

Luz en lo profundo

Keiko venía a La Tierra, procedente del planeta Orbe, ubicado en las inmediaciones de la constelación de Andrómeda, su raza se caracterizaba por tener cualidades éticas, algo que en La Tierra se había perdido con el paso de los años. Keiko antes de entrar a la atmósfera terrestre pudo darse cuenta que algo andaba mal con los valores en una región específica del planeta azul, vio en su receptor de valores, que Colombia tenía índices muy altos de corrupción, pensó que enseñar ciertas normas de mundos con civilizaciones alejadas del robo estatal, vendría muy bien para los habitantes del país.

Aterrizó en horas de la madrugada en el parque Tercer Milenio de la capital del país, todo porque el indicador de corrupción le alarmaba de la cercanía de la zona de conflicto de valores, cuando bajó de su nave vio en los alrededores personas que dormían en la intemperie, algunos quedaron sorprendidos, y pensaron que lo que estaban viendo era producto de los alucinógenos que consumían normalmente.

Keiko comenzó a relacionarse con algunas personas, preguntando sobre corrupción, porque su receptor captaba señales de pérdida de valores, uno de los hombres que parecía estar en sano juicio le respondió que la corrupción lo había dejado en la calle, y que la equidad no existía en Colombia, el humanoide orbetano descubrió que la corrupción era el detonante para más problemas, en el mundo de Keiko estas fallas de equidad eran mitos de antiguas generaciones.

Fueron llegando cada vez más curiosos, personas de muchas edades que se disponían a ir a sus trabajos, pero quedaban sorprendidos por la nave, Keiko, pese a ser de otro mundo, tenía una fisionomía similar a los humanos, solo que él en su interior tenía dos corazones y un cerebro más grande.

La multitud comenzó a escuchar el discurso del extraterrestre, la mayoría por no decir todos, estaban de acuerdo sobre el fin de la corrupción, parecía que las palabras que salían de Keiko fueran mágicas, todos tenían un pensamiento unificado, era un virus positivo y sano que se propagaba en las personas, todos querían ir a las coordenadas 4°35′51″N 74°04′35″O lugar del problema.

Cientos de personas marcharon hacía el capitolio, encabezando el grupo de marchantes estaba Keiko, que era alimentado por la energía que emanaba del gentío vociferante, con su don discursivo persuadió a los protectores de las puertas del emblemático edificio, el extraterrestre y sus acompañantes entraron.

Cuando Keiko habló con los líderes políticos, notó que su poder de convencer no surtía efecto en los oscuros personajes, los pícaros tenían su propio poder de convencer a los desprevenidos, y lograron llamar a la fuerza de seguridad para sacar violentamente a todos los manifestantes, el extraterrestre actuó de forma desesperada para escapar de la situación, activó un dispositivo que expulsaba un gas que originaba que todos hablaran con la verdad, el efecto duraría 4 años, tiempo estimado para llevar las mentes de la oscuridad a la luz.

viernes, 10 de julio de 2015

El Conflicto

La paz en Colombia la han buscado los dirigentes desde hace décadas, y los ciudadanos han sufrido también años de conflicto, esperando esa anhelada paz; vemos una guerra que no tiene fin, el actual mandatario colombiano Juan Manuel Santos, tuvo como punto central en la campaña para la presidencia la idea de terminar con la guerra, millones de colombianos (7.816.986) votaron por él confiando en el proceso de paz que se desarrolla en Cuba, los colombianos con el paso de los meses han perdido las esperanzas del diálogo, teniendo en cuenta las oleadas terroristas que durante dicho proceso han efectuado los guerrilleros, es inevitable no recordar los hechos más recientes que se relacionan con el daño ambiental originado por el derrame de crudo en zonas rurales del departamento de Putumayo, son millones que pierde el país por el capricho delincuencial además lo mencionado anteriormente como el daño ecológico a la región, y también el perjuicio para los lugareños que viven de los cultivos que produce la tierra.

La situación del terrorismo hace que se pierda la fe en el proceso, seguramente el presidente tiene toda la mejor voluntad para evolucionar para bien de Colombia el camino hacia la paz, pero observamos algo muy distinto del grupo revolucionario, los ciudadanos no los ven con intenciones reales, porque el proceso se dilata y los avances en temas bélicos no se cristalizan, se recalca en este tema por los efectos armamentistas de la guerrilla, muchos civiles y soldados han caído en el conflicto, muchos inocentes desaparecidos en la guerra, un caos social que ha generado falsos positivos, miles de desplazados, acciones armadas donde no sólo caen guerrilleros, caen niños que obligados por las circunstancias están en las filas subversivas, además de los campesinos que no tienen otras posibilidades y se tienen que unir a los grupos ilegales, si la paz se hubiera logrado, aunque viendo el país, se hace difícil pensar que los falsos positivos no se darían, nadie asegura eso.

Tanta suciedad en la política no se puede tapar con un dedo, pero tampoco la realidad de la cochina guerra que no acaba por los beneficios a cada bando, ejército y guerrilla se benefician, 1° un pastel de la plata de la nación para fuerzas militares en su negocio bélico, 2° la guerrilla no quiere paz porque hacen sus negocios de drogas y les entra millonadas, entonces yo como observador digo, ¿el proceso de paz es un engaño del gobierno para ser más popular? Donde se sabe que en el fondo nadie quiere ceder sus beneficios en sus trueques y negocios sucios, la guerra no es buena para nadie, pero acá eso lo veo que no lo piensan acabar, y más por el lado de los narcoterroristas que siguen sin dar un buen lado, y quieren ser absueltos de sus delitos ojo a eso, porque hay militares investigados por corrupción, que merecen ser juzgados también como cualquier fulano criminal.


Tenemos que ver qué ocurre en los días de cese unilateral, lo que se recuerda es que el Gobierno no puede descuidar regiones donde operan otros grupos al margen de la ley, o sea que queda complicado también para las fuerzas militares ceder terreno a las Farc, su misión es proteger el territorio nacional de la tropas ilegales, es posible que sea algo pesimista con todo lo relacionado al proceso de paz, pero es lo que hemos visto los colombianos en los casi 3 años de diálogos, y lo que realmente importa es el fin de las hostilidades, pero cada día salen noticias donde la guerrilla de las Farc aparece como protagonista, para finalizar existe un dato oficial  del Centro de Recursos para el Análisis del Conflicto (Cerac) en el que se registran 83 actos violentos durante el mes de junio de la guerrilla a instituciones oficiales y población civil, no es un dato menor, y demuestra las intenciones negativas de la guerrilla, reitero, la guerra no es buena para el pueblo, es un gran negocio para algunos, y desde que exista disponibilidad y buena fe de las partes todo saldrá bien, de lo contrario es gastar pólvora en gallinazos.